En tu mano están mis tiempos». Salmo 31:15
Hace unos días me montaba en un avión para dirigirme hacia mi hermosa isla de Puerto Rico con mi familia para atender un compromiso ministerial. Cuando me siento en el asiento, me abrocho mi cinturón de seguridad, le abrocho el cinturón de seguridad a mi hija menor, miro hacia mi esposo y mi otra hija mayor para verificar que todo estuviera en orden. Cierro mis ojos y comienzo a hablar con el Padre porque necesitaba que hablara a mi espíritu.
Con mis ojos cerrados, tuve una visión en la que veía muchos pies descalzos caminando de forma hermosa, resplandeciente y segura con siluetas ataviadas con vestidos blancos. En ese momento, siento cómo el Padre susurra a mi espíritu una frase: «el sonido de la transición». ¿Sabes que tu temporada está a punto de transicionar? ¿Sabes que hay un sonido que te indica el inicio de tu transición?
Tu temporada está a punto de transicionar cuando ya tus fuerzas se acabaron y tienes que decidir rendirte o levantarte. Cuando escoges levantarte, el sonido que emites es uno de victoria y te posiciona para dar inicio a una victoria sin precedentes. Cuando escoges creer en vez de dudar, das inicio a una temporada de fe y Su sonido ahogará el ruido de la incredulidad. Cuando escoges ver quién eres en Dios, comienzas a transicionar en al acercarte al diseño original de Dios para ti. El sonido de aceleramiento sobre tu vida se desata y se alinea con la verdad del cielo. Cada día recuérdale al enemigo quién tú no eres y deja que Dios te recuerde lo que eres en Él.
«Irá andando y llorando el que lleva la preciosa simiente; mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas». Salmo 126:6
Sé de esos con paso firme y vestiduras de justicia y verdad. Sé de los que confían en que el reloj del tiempo de Dios suena a favor de una nueva transición de poder y cumplimiento. Alineate con las manecillas de la hora de Dios para ti. Escucha Su sonido marcando a tu favor y camina en favor del cumplimiento divino.
Vilmarie
