Con la ayuda de Dios haremos grandes cosas; ¡Él aplastará a nuestros enemigos!». Salmo 108:13

Estar dispuesta es estar preparada para ser utilizada; es estar decidida a hacer algo. Te doy un consejo: hecha en la basura tus barreras de imposibilidad de una vez y por todas. Te han paralizado por demasiado tiempo.

Este devocional es una invitación a actuar. Más que ser una simple invitación, ésta palabra requerirá un acto de valentía. Comienza a verte como Dios te ve y comienza a ver qué tienes en tus manos. Basta ya de menospreciar lo que Dios mismo formó y llamó «a imagen y semejanza».

Deja de mirar atrás con arrepentimientos o mirar hacia adelante con miedo. Mejor da lo mejor que tienes hoy en tus manos. Toma una pausa y establece límites en tus compromisos y el trabajo diario. Asegúrate de que aquellos a quienes amas siguen siendo los primeros en tu vida.

Comprométete a cumplir tus sueños… y atrévete a seguir adelante ante los desafíos de la vida. Prométete a ti misma que nunca volverás a verte como una derrotada sin futuro, pues tu destino es glorioso.

Vístete de victoria hoy y levanta tu cabeza. ¡¡¡Fuiste sellada con un propósito eterno!!!

Vilmarie